Nos gustan las comillas latinas, porque abrazan a las palabras, en vez de ponerse por encima.
… ¡Vivan las comillas latinas!
Nos gustan las comillas latinas, porque abrazan a las palabras, en vez de ponerse por encima.
… ¡Vivan las comillas latinas!Mover una imprenta tipográfica no debe ser tarea fácil (no hay que olvidar que los tipos son de plomo), especialmente si el transporte es una carreta. Aún así, parece claro que cuando las circunstancias lo requieren, no se duda en movilizar a los impresores y enviarlos al campo de batalla.
La viuda de Bodoni terminó de imprimir el monumental Manuale tipografico en 1818, tras la muerte del célebre tipógrafo. Entre los 665 alfabetos con que contaba la fundición bodoniana, —casi la mitad de ellos obra del propio Giambattista— se encontraban todo tipo de lenguas exóticas como, por ejemplo, el alfabeto malabar.
Fuente: Biblioteca Bodoni
FIGGINS, Vincent. Primeras versiones tipográficas de letras de estilo toscano del siglo XIX, de su muestrario de 1815. Reproducidas en: MEGGS, Philip B. y PURVIS, Alston W. Historia del diseño gráfico, Barcelona, RM Verlag, 2009, p. 136.
FIGGINS, Vincent. Specimen of plain and ornamental types, London, V & J Figgins, 1845. Disponible en: http://archive.org/details/SpecimenOfPlainOrnamentalTypes [consulta: 27 agosto 2016].